Siempre tratamos de transmitiros que el origami no es difícil, que
no entraña dificultad y que podemos encontrar personas que si no son muy
hábiles con las manualidades si se encuentran cómodas con el plegado del papel.
EL origami no requiere de gran complicación en materiales ya que
necesitamos papel y nuestras manos.
Esta técnica además invita a la relajación y la concentración y
una vez que nos introducimos en ella nos va gustando cada vez más, en silencio
o con música en un ambiente tranquilo la respiración se va haciendo cada vez
más lenta y sin darnos cuenta el reloj va avanzado y nos ensimismamos.
Y exactamente es lo que nos ha ocurrido cuando decidimos decorar
unos palillos con origami y utilizarlos para decorar nuestras cenas, fiestas,
aperitivos.
En este caso no hemos recurrido al plegado con papel origami, es
decir estos bellos papeles también tienen utilidades diversas más allá del
plegado y la creación de bellas y divertidas figuras.
Si que es cierto que hay que armarse de paciencia porque en este
caso hemos utilizado la regla para crear las figuras geométricas que
necesitábamos y la guillotina para cortar el papel y posteriormente pincel y
pegamento, laborioso pero con un bonito y divertido resultado, que una vez
finalizado os va a encantar.
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Nosotros hemos utilziado papel origami pero puede hacerse con cualquier otro papel, como consejo es mejor un papel no demasiado fino, no se trabaja bien y al añadir el pegamento el papel pierde cuerpo.
El primer paso es dividir el papel como aparece en la imagen, en rectángulos de 5X2 cm. El papel de origami normalmente tiene unas medidas de 15X15, también podemos encontrarlo de otras medidas pero la habitual es esta, que es el utilizado.
Y podéis ver el resultado en las siguientes imágenes.
